El susto del colmillo

Como vencer tu miedo al dentista

Érase una vez…

un pequeño vampiro llamado Dante, que vivía con su familia en un oscuro y acogedor castillo rodeado de niebla y murciélagos juguetones. Dante era un vampiro muy especial porque, a pesar de ser pequeño, tenía unos colmillos grandes y brillantes que todos admiraban. Pero un día, Dante empezó a sentir un dolor en uno de sus colmillos. No quería preocupar a su familia, así que decidió no decir nada.

El dolor empeoró cada vez más, hasta que Dante ya no podía morder las deliciosas frutas que le traían sus amigos murciélagos. Incluso le costaba sonreír porque el dolor le pinchaba como si tuviera una espina en la boca. Pero Dante, en lugar de contarle a alguien, pensó: “Si no digo nada, el dolor desaparecerá solo”.

Esa noche, durante la cena, su mamá se dio cuenta de que Dante estaba más callado de lo normal.

—¿Estás bien, cielo? —le preguntó con voz suave.

Dante asintió, pero un pequeño gemido se escapó de su boca cuando intentó morder una fruta.

—¡Ay! —exclamó, llevándose la mano al colmillo.

—¡Dante! —dijo su mamá con preocupación—. ¿Te duele algún colmillo?

Dante no quería admitirlo, pero no pudo más y lo dijo:

—Sí, mamá. Me duele mucho, pero tengo miedo de ir al dentista. ¿Y si me sacan el colmillo? ¡Yo quiero mis colmillos perfectos para siempre!

Su mamá lo abrazó y le dio un beso en la frente. —No te preocupes, Dante. El dentista no te va a hacer daño. Vamos a ir juntos y verás que, al final, te sentirás mucho mejor.

Al día siguiente,

Dante y su mamá fueron a la clínica dental del pueblo de los monstruos. Allí, los recibieron con una sonrisa. El dentista era un hombre muy simpático, con un gran mostacho y un espejo en la frente que brillaba como una estrella.

—¡Hola, Dante! —dijo el dentista con voz alegre—. ¡No te preocupes! Vamos a ver qué le pasa a ese colmillo travieso.

Dante se sentó en la gran silla roja, un poco nervioso, pero el dentista le explicó todo con calma y paciencia. Después de revisar su colmillo, sonrió y dijo:

—¡Ah! Aquí está el problema. Tienes una pequeña caries. Vamos a limpiarla y arreglarla en un santiamén.

Dante cerró los ojos y, aunque estaba asustado, respiró profundo y pensó en cosas bonitas: en su castillo, en sus amigos murciélagos y en las noches de luna llena que tanto le gustaban. Antes de darse cuenta, el dentista ya había terminado.

—¡Listo! —anunció el dentista con una sonrisa—. ¡Tu colmillo está como nuevo!

Dante se miró en el espejo y vio su sonrisa brillante. ¡El dolor había desaparecido! Se sintió tan feliz y orgulloso de haber sido valiente.

Esa noche,

Dante contó a sus amigos murciélagos lo que había pasado. Les explicó que, aunque al principio había tenido miedo, enfrentarse a su temor le había hecho sentirse mucho mejor. Ahora sabía que no había que esconder un problema, sino hablar de él para solucionarlo.

Y así, Dante aprendió que ser valiente no significa no tener miedo, sino enfrentarlo y pedir ayuda cuando la necesitamos.

Y desde entonces, cada vez que sentía algo raro en sus colmillos, lo contaba sin dudar a su mamá, porque sabía que siempre había alguien dispuesto a ayudar

Nota para los mayores

Valores y temas del cuento:

Valentía y Superación del Miedo:
- El cuento muestra que tener miedo es natural, pero la verdadera valentía está en enfrentarlo. Dante se siente asustado de ir al dentista, pero logra superar ese temor con el apoyo de su mamá y el dentista, dándose cuenta de que no era tan aterrador como pensaba.
Importancia de la Comunicación:
- Dante aprende que es importante hablar sobre lo que nos preocupa o duele, en lugar de guardárselo. Expresar nuestros miedos y problemas nos permite recibir ayuda y sentirnos apoyados.
Confianza y Apoyo Familiar:
- La relación de Dante con su mamá muestra un entorno de confianza y apoyo. Su mamá lo escucha, lo entiende y lo acompaña, enseñándole que puede contar con su familia para enfrentar cualquier problema.
Cuidado de la Salud:
- A través de la historia, los niños también aprenden sobre la importancia del cuidado dental y cómo mantener una higiene adecuada es fundamental para evitar problemas en los dientes, como las caries.

Preguntas para Reflexionar:

¿Alguna vez te has sentido asustado/a de ir al dentista o a otro lugar? ¿Por qué?
- Esta pregunta invita a los niños a expresar sus propios miedos y a reflexionar sobre sus experiencias, identificando las razones de su miedo.
¿Qué te ayudó a sentirte mejor cuando estabas asustado/a?
- Aquí los niños pueden pensar en las cosas que les dan seguridad o los hacen sentir mejor en situaciones de miedo, como el apoyo de un familiar, un juguete especial o una actividad relajante.
¿Por qué crees que es importante contar a los demás cuando algo te preocupa o te duele?
- Esta pregunta fomenta la reflexión sobre la importancia de comunicar sus problemas y la ayuda que pueden recibir al hacerlo.
¿Cómo podrías ayudar a un amigo que tiene miedo de hacer algo?
- Esta pregunta les enseña empatía y a pensar en cómo pueden apoyar a los demás, compartiendo sus propias experiencias o estando a su lado.

Actividades Complementarias:

Crea un “Mural de los Miedos y la Valentía”: Invita a los niños a dibujar o escribir sobre alguna situación que les haya dado miedo y cómo lograron superarlo. Luego, pueden pegar sus dibujos en un mural y decorarlo con estrellas, colmillos (para representar a Dante) y corazones, destacando su valentía.
“Pasaporte Dental” Personalizado: un pequeño cuaderno o tarjeta donde los niños puedan anotar cada visita al dentista, con un dibujo o pegatina que represente su experiencia. Podrán añadir comentarios como “¡Fui valiente hoy!” o “¡Mi colmillo está perfecto!”.
Cuento Colectivo sobre el Miedo: Invita a los niños a crear su propio cuento en grupo. Cada uno puede añadir una parte de la historia, inventando un personaje con un miedo especial y cómo lo supera. Al final, tendrán un cuento único y original que podrán leer juntos.
Dibujar a Dante con una Gran Sonrisa:Después de leer el cuento, cada niño puede dibujar a Dante sonriendo y decorarlo con detalles que le hagan pensar en cosas que le den felicidad y tranquilidad. Luego, pueden compartir por qué eligieron esos elementos y qué representan para ellos
Juego de “Enfrentando a los Monstruos” un juego de mesa sencillo donde cada casilla representa un miedo (por ejemplo, ir al dentista, oscuridad, etc.) y los jugadores deben tirar el dado y compartir una idea o truco que usarían para superar ese miedo. Ganará quien llegue al final habiendo enfrentado a todos los “monstruos” del tablero. Pulsando el botón encontraréis más detalles del juego que os he preparado